R.P. Lucio Huerta, Miguel Ángel Silva Esquén, Melecio Tineo Morón (Compiladores)
Centenario de la Parroquia de san Juan Bautista de Huaral,
jurisdicción de la Diócesis de Huacho (1917-2017).
Parroquia de san Juan Bautista de Huaral, Lima, 2017, 375 pp
Se presentó en la plaza de armas de la provincia de Huaral, el día
sábado 24 de junio de 2017 día de la festividad de san Juan Bautista,
a horas 1:30pm , en dicho acto estuvieron presentes el
Excelentísimo Monseñor Antonio Santarsiero Rosa,osj, obispo de
Huacho, Monseñor Alejandro Albitez Bermúdez, vicario general de la
Diócesis Huachana , la señora Ana Koboyashi, alcaldesa de la
Municipalidad provincial de Huaral acompañada de los señores
regidores, los comentarios del libro estuvo a cargo del licenciado
David Fernández Villanova, el resumen del trabajo a cargo de Nivardo
Córdova Salinas quien publicó una interesante nota en el blog:
https://archivohuacho.wordpress.com/?blogsub=confirming#subscribe-blog.
Ahí se indica que la obra trae detalles importantes para entender el
proceso de la evangelización llevada a cabo por la Iglesia Católica,
y para comprender la vida cotidiana de las antiguas comunidades.
Constituye un gran aporte a la historia regional, ha sido editado en
el marco de la conmemoración del primer centenario de fundación de
dicha parroquia, jurisdicción del Obispado de Huacho.
En labios de Melecio Tineo - presidente del comité de redacción- "el
libro centenario es una lectura obligada para todo huaralino de
corazón para conocer su rica historia y belleza natural de la región
elemento central de su identidad. En el acto expresó su gratitud y
reconocimiento merecido a Monseñor Antonio Santarsiero Rosa, osj,
obispo de Huacho, al padre Lucio Trujillo Huerta, párroco de la
parroquia de San Juan Bautista de Huaral, al padre Evaristo Persibis
Castro Fernandez, vice-párroco, al Lic. Don Miguel Angel Silva
Esquén, vice- presidente del comité, al bachiller Jimmy Martínez
Céspedes, secretario del comité, a los autores de los artículos
quienes nos entregaron a tiempo sus trabajos, doctora Sara Gonzáles
Castrejón, doctora Ybeth Arias Cuba, Lic. Elizabeth Pilar Anaya
Rodríguez, magister Kelly Montoya Estrada, bachiller Jimmy Martínez
Céspedes, bachiller Jhosiel Jairo Falcón Buitrón, Lic. Miguel Angel
Silva Esquén, Lic. Gerardo Manuel Trillo Auqui, magister Pieter Dennis
Van Dalen Luna, así mismo agradezco al profesor Juan José Brito
Ramos, quien se encargó de la diagramación y diseño". Y finalmente
agradecer a Carmen Villanueva Palomino, destacada periodista del
semanario Litoral de Huacho, a Percy de cable color Huacho
Como la intensa historia del Perú, Huaral atraviesa varios milenios,
desde los complejos arqueológicos de Yaros y Rupac Marca Kullpu, la
Fortaleza de Añay, la ciudadela de Cachimarca, para formar parte de la
forja de la nacionalidad en el Virreinato, la Emancipación y la
República.
La obra la abre Mons. A. Santarsiero, obispo de Huacho, que siempre
acompaña y anima toda obra cultural diocesana. El prólogo de Juan
Antonio Carrillo Retuerto brinda una magnífica síntesis de los autores
y sus trabajos.
El cuerpo del libro se articula en cinco secciones. La primera,
"Huaral en sus 466 años de historia", dedicada a presentar la
trayectoria histórica del pueblo y de su iglesia. Comprende en primer
lugar el estudio "La Iglesia San Juan Bautista y la fundación del
pueblo de Huaral, 1551" (21-32), de Pieter van Dalen Luna, quien hace
hincapié del profundo vínculo existente entre la construcción del
templo y la formación de la Universidad Mayor de San Marcos, gracias a
la presencia de los dominicos Tomás de San Martín y Domingo de Santo
Tomás. El segundo estudio lleva por título "Reseña histórica del
pueblo de San Juan Bautista de Huaral"(33-102), de Miguel Ángel Silva
Esquén, quien traza el largo recorrido del pueblo iniciado en Las
Shicras, durante el periodo Arcaico Tardío (3000 a C), para continuar
con la cultura Chancay; el tiempo virreinal con la fundación de la
Villa de Arnedo (hoy Chancay), Santo Domingo del Real de Aucallama y
San Juan Bautista de Huaral, con todo el proceso de mestizaje racial y
cultural, por la presencia española y africana, siempre al calor del
acontecimiento de la evangelización (misión, visitas pastorales,
erradicación de la idolatría). Por último, el autor destaca la
poderosa participación en la Independencia –con el paso de la
expedición libertadora, sobre todo en Retes-, la República (Guerra con
Chile), hasta la creación del distrito (31-octubre-1890) y provincia
(11-mayo-1976). Se adjuntan varios anexos de interés: Relación de
monumentos arqueológicos en Aucallama, Chancay y Huaral, relación de
sacerdotes que administraron sacramentos en la iglesia parroquial de
SJBH desde 1877 al 2016, acta de instalación del Concejo Municipal de
Huaral en 1893, petición de creación de parroquia en 1915, decreto ley
21488 de creación de la provincia, relación de alcaldes desde 1893,
principales fechas en la historia de Huaral.
La segunda sección se denomina "Evangelización, cofradías y
Extirpación de la idolatrías en las parroquias indígenas del
Corregimiento de Chancay". Contiene en primer lugar el texto: "Pueblos
de indios de Atavillos Bajos y San Juan Bautista de Guaral en el siglo
XVII: sus realidades dentro del proceso de evangelización", de Jhosiel
Jairo Falcón Buitrón. Aporta excelentes materiales de archivo pero
aventura conclusiones que exigen mayor madurez reflexiva. Es
inadmisible el inicio de su artículo donde indica que "la
evangelización cristiana traída por la Iglesia Católica" se destaque
como "la fachada o supremo fin" expresada por los españoles en sus
diversas jerarquías, para ejecutar la invasión, conquista y
colonización" (p.105). O lo que afirma sobre el Concilio de Trento que
"abolió los ritos eucarísticos locales" (p.113) o en la nota 18 que la
administración civil sólo pensaba de los aborígenes en términos de
mano de obra y tributos (p.115).
El segundo artículo se debe a de Kelly Montoya Estrada, quien en
"Cofradías y Hermandades en las doctrinas de Huaral y Chancay"
(139-169) nos presenta el rico y conflictivo entramado de la
religiosidad popular a través de las cofradías durante el virreinato
en Arnedo (Santísimo Entierro, Santa Rosa, Santísimo Sacramento, la
Candelaria, Nuestro Amo y Nuestra Señora) y las hermandades durante
los siglos XIX y XX (Caballeros del Santo Sepulcro, Santísima Cruz de
Campo Grande, Santísimo Sacramento, Virgen de las Mercedes, Sagrados
Corazones, Virgen de Fátima, Señor de los Milagros, San Martín de
Porres, San Isidro Labrador)
El tercero lleva por título "Las visitas pastorales en Santo Domingo
de Aucallama en el siglo XVIII", de Elizabeth Pilar Anaya Rodríguez,
que rescata las realizadas en 1704 por el arzobispo Melchor de Liñán y
Cisneros a través del Dr. Francisco de Cisneros y la de 1775, en
tiempos del arzobispo Antonio de Parada y con el visitador Francisco
Javier de Echavarría.
El cuarto y último de la sección es "La extirpación de las idolatrías
en el Corregimiento de Chancay en el siglo XVII", de Jimmy Martínez
Céspedes quien pretende completar la investigación de Ana Sánchez en
1991 aportando la interesante documentación inédita del AOH, BNP, AAL
en los anexos.
La tercera parte se dedica al Arte religioso en Huaral, "Evolución
histórica y artística de la Iglesia de San Juan Bautista de Huaral",
(247-282), de Sara Gonzales Castrejón, quien nos comparte un acabado
estudio no sólo técnico, estético, sino espiritual, rescatando
proyectos, realidades, zozobras, celebraciones de la familia
parroquial liderada por sus párrocos y que nos permite conocer la
historia y la intrahistoria de su templo parroquial. Su conclusión no
tiene desperdicio y merece transcribirse: "La Iglesia de SJBH, que hoy
día yace abatida y con la techumbre desplomada, es un palimpsesto
arquitectónico como la mayoría de los templos del Perú, que sufren
sismos, lluvias torrenciales, y todo tipo de desastres naturales, pero
aun así perviven por el amor de sus feligreses. Quizá las refacciones
que se han llevado a cabo en ella en el siglo XX no se adapten a
criterios actuales, pero dan testimonio del compromiso y amor de su
comunidad, y sobre todo del tesón de sacerdotes que lucharon contra
viento y marea por dotar de un lugar de apoyo y aprendizaje a su
pueblo, especialmente a los más vulnerables" p.274. Como "yapa" nos
regala fotos, planos y 7 documentos transcritos pacientemente del
servicial y puntero Archivo del Obispado de Huacho.
La cuarta "La presencia china en la vida religiosa de Huaral", "De
China a Huaral: la vida del padre Pedro José del Carmen Véliz (ca.
1847 – 1926)" 285-293 de Ybeth Arias Cuba, quien nos brinda una
acuciosa semblanza como acreditan las 77 notas bibliográficas. Me ha
resultado conmovedor conocer el proceso de conversión de este joven
budista procedente de Cantón, nacido en 1846, y que se bautizó un 5 de
diciembre de 1872, gracias al buen hacer de la Madre Dominga Gazcón y
sus catequesis en la Casa de Ejercicios de Santa Rosa. La gracia le
vino por encontrar en el suelo una estampa de la Virgen del Carmen
cuando escuchaba con gusto la prédica de los misioneros. Recibió el
Orden Sacerdotal en Ayacucho un 22 de diciembre de 1822 y ejerció su
acción pastoral por Acobamba, Pullo, Chala, Pampachiri, Pausa,
Huancavelica, Parinacochas, Apurímac, Ayacucho y Chancay donde
reconstruyó su arruinado templo. Debido a su salud, en 1900 tuvo que
dejar Ayacucho por un clima más benigno, de ahí que desde 1900 se
incardinó en Huaral donde se dedicó en cuerpo y alma a sus fieles
hasta el momento de su muerte, 26 de octubre de 1826. Atendió el
distrito de Huaral y las capillas de las haciendas circundantes como
Huando, Palpa, La Huaca y Caqui. Entre los testimonios recogidos por
la autora del artículo, selecciono del que dieron sus parroquianos,
cuatro años después de su deceso: ¡Fue tanto el celo que desplegó en
su evangélica misión, que todas las entradas de la Parroquia las
destinaba a objetos de culto y el restante los repartía a los
necesitados, no dejando en abandono [en] este valle de lágrimas, más
que sus virtudes y su acción verdaderamente apostólica!" (p.305)
Finalmente, en la sección dedicada a la "Participación de Chancay en
la Guerra con Chile", se presenta la documentada investigación:
"Huaral en la Guerra con Chile", de Gerardo Trillo Auqui.
Se da cumplida cuenta de los autores, y compiladores. Por ultimo, 12
páginas de fotografías y un mapa geográfico.
Detrás y delante de todo se palpa la persona de Melecio Tineo Morón,
diligente director del Archivo del Obispado de Huacho, quien ha
suscitado y aglutinado tantas y tan autorizadas voluntades, desde
Monseñor Antonio Santarsiero, obispo de Huacho, pasando por el P.
Lucio Trujillo, actual administrador parroquial de Huaral, el
historiador M.A. Silva, compilador y articulista, junto a los nueve
historiadores que logran, con altura científica, contextualizar la
historia local –especialmente religiosa- de Huaral, en la historia
diocesana de Huacho y en la nacional del Perú. Merecidas gracias por
su labor.
José Antonio Benito