miércoles, 16 de septiembre de 2015

ARTOLA, Antonio María, Dolorosa. Meditaciones sobre la compasión de María. Recensión P. Crlos Rosell

ARTOLA, Antonio María, Dolorosa. Meditaciones sobre la compasión de María, Lima 2014, 306 pp.

El P Antonio Artola, sacerdote pasionista y renombrado biblista, nos ofrece este libro mariológico donde plasma una serie de ideas, teniendo como hilo conductor a María como la dolorosa, una advocación de mucho raigambre en la piedad del pueblo católico.

Nos encontramos con sesenta meditaciones sobre la Virgen Dolorosa, donde se van desplegando en siete partes una serie de aspectos sobre el dolor que experimentó la Madre del Salvador. Podemos decir que el objetivo del texto es adentrarnos en el corazón doloroso de María, y de esa manera tomar conciencia que la Santísima Virgen es la primera en saborear la Cruz de su Hijo Jesús. Al final, nuestro autor a manera de apéndice presenta a Santa Gemma Galgani, una mística de espiritualidad pasionista, como aquella que mejor ha vivido la espiritualidad de la compasión, cuyo modelo es María.

El P. Artola con la calidad y profundidad teológica-espiritual a la que ya nos tiene acostumbrados en sus otras obras, expone el dolor de María siguiendo todo el itinerario por el que pasó la Madre de Jesús. Así, en la primera parte se aboca a desarrollar el dolor de preparación que experimentó María. En efecto, ella fue preparada por Dios para aceptar el dolor de contemplar a su Hijo como signo de contradicción. A este respecto, el P. Artola en esta parte nos presenta temas como "¿Por qué sufrió María?", "El dolor de la singularidad", "La angustia del destino", "El dolor de creer", "En el templo de Yahveh". Sobre la singularidad del dolor de María, el P. Artola hace notar que el dolor de María es singular dado que ella es la toda santa, la inmaculada.  A este respecto leemos: «La singularidad inocente de María la ponía en un estado peculiar de dolor por la consiguiente soledad que le creaba en medio de sus hermanos todos manchados. Nadie era como ella. Y ella misma no era como nadie» (p.26).

Acto seguido, las siguientes partes del libro están estructuradas en torno a los siguientes temas: el dolor de Virgen el dolor de Madre, el dolor de Mujer, el dolor de contradicción, el dolor de corredención. Y todo ello desemboca en la última parte llamada «La gloria del dolor». Con relación a esto último leemos: «El dolor de María tuvo su mayor sublimación en el momento en que, elevada en cuerpo y alma al cielo, fue coronada por la Trinidad como reina de todo lo creado» (p.295).

Cada uno de los temas tiene una ambientación poética, dado que nuestro autor inicia su desarrollo siempre con unos versos de estilo poético para pasar luego a explayar el tema en cuestión. Para ello, tiene siempre presente los diversos pasajes de la vida de la Santísima Virgen María.

Recomendamos la lectura de este libro, sobre todo a quienes desean profundizar en el conocimiento de la Santísima Virgen María. A lo largo de la redacción, se unen de manera brillante: la sensibilidad poética, el dato bíblico, y el rigor especulativo del autor.

P. Carlos Rosell De Almeida.