jueves, 30 de junio de 2022

Memorias de Orbea infancia y juventud desde una hacienda limeña, 1922-1947 Puente Candamo, José Agustín de la (Orbea Ediciones, 2022, 211 pp)

Memorias de Orbea infancia y juventud desde una hacienda limeña, 1922-1947

Puente Candamo, José Agustín de la

 (Orbea Ediciones, 2022, 211 pp)

El 22 de mayo de 1922 vino al mundo en su hacienda Orbea y casi 98 años después -el 5 de febrero del 2020- desde el mismo hogar nos dejó. Casi cien años y no de soledad, sino de fecundidad. Me gusta titularlo caballero centenario del Bicentenario. Desde que el Dr. Demetrio Ramos -en la Universidad de Valladolid (España)- en el Curso de "Historia de los Estados Iberoamericanos" nos recomendó la lectura de su libro "La Independencia del Perú" (Madrid, Mapfre, 1992) no he encontrado mejor guía para adentrarme en el estudio de su proceso.

Se abre la obra con la nota introductoria de su hijo José quien nos da cuenta del valor de las memorias y contextualiza las presentes con datos confidenciales sobre la génesis y desenvolvimiento del proyecto editorial. En el prólogo el Dr. de la Puente confiesa la dificultad para ordenar "la propia memoria" acerca de historia grande y pequeña sobre el espacio y la gente de Orbea, con el Perú como telón de fondo. Nosotros se lo agradecemos, especialmente porque sin duda que puede ser un referente para otras historias cotidianas de familias.

La obra se articula en tres apartados, el primero "vida en Orbea" acerca de los recuerdos de infancia y lo que fue su vida en un pueblo y en una hacienda. Me ha estremecido el relato del golpe vital que supuso la muerte de su única hermana, Teresita, a los 18, quien a todas luces- y hasta en la carta de la Venerable Teresa de la Cruz Candamo- fue un auténtico ángel. El segundo "La Lima de mi infancia y juventud" se refiere al espíritu limeño y criollo de los años veinte y treinta. El tercer apartado "mi formación escolar y mi vida universitaria" describe su primera formación en Orbea a cargo de su madre y profesores particulares, seguida de su formación escolar en La Recoleta donde tuvo como profesor al P. Dintilhac, fundador de la PUCP.

A continuación, se presenta una semblanza biográfica escrita por su hijo Manuel, sacerdote. Por último, "El Eco de Orbea" hace referencia a un simpático e ingenuo periódico de los entonces niños José Agustín y Teresa, entrañable evocación de su hijo Lorenzo acerca de lo que fue la vida de su padre, acompañada una significativa foto, la de su matrimonio con Hildegard Brunke, el 31 de agosto de 1960, y que llenará de luz y calor una nueva época en Orbea.  

La obra, exquisitamente editada, nos brinda sus memorias de infancia y juventud, desde su hogar familiar la vida en la hacienda Orbea, la chacra de Magdalena Vieja -hoy Pueblo Libre. Gracias a las conversaciones de su hijo Lorenzo, las entrevistas de Emilio Candela, y algunos textos del propio autor, se han podido rescatar los primeros 25 años de su vida -1922-1947- fecha en inicia su docencia en la PUCP de la mano del P. R. Vargas Ugarte y colabora con Víctor Andrés Belaunde en la fundación del IRA. En la selección de fotos y confrontación de textos ha trabajado la historiadora Leticia Quiñones Tinoco.

Sus páginas nos ofrecen a la manera de J. Gálvez su personal visión de la Lima que se fue. Junto al relato escrito, el lector podrá apreciar un relato fotográfico, que es muy original para mejor conocer unos tiempos muy distintos de los actuales. 118 ilustraciones con históricas fotos dan vida a los entrañables textos vitales del gran maestro de la historia del Perú, don José Agustín de la Puente Candamo. Que nos predica con su ejemplo. Tanto hablar de la vida cotidiana del Perú, esta obra es un tesoro del día a día -con la discreción pudorosa y elegancia de costumbre- de nuestro recordado historiador.

Tan excelente manjar nos deja con apetito para seguir saboreando una vida tan sustanciosa de la que Perú puede enorgullecerse de veras. 

Foto de la boda de don José Agustín con Hildegard Brunke; los padrinos Graciela Ríos y JOsé de la Puente Olavegoya; preside ceremonia Cardenal Juan Landázuri. Capilla Orbea, 31 de agosto de 1960

lunes, 20 de junio de 2022

Revista del Archivo Arzobispal de Arequipa nº 15, 2021, 546 pp.

Revista del Archivo Arzobispal de Arequipa nº 15, 2021, 546 pp.

Celebro, felicito y agradezco la magnífica contribución del Archivo Arzobispal de Arequipa al Bicentenario patrio con esta voluminosa publicación tan rica de contenido de primera mano, novedoso, acerca del acontecimiento de la Independencia desde la Blanca Ciudad.

Su director Álvaro M. Espinoza ha contado con el apoyo del magíster Helbert Suyo Ñaupa en la afanosa edición del presente número 15 que se articula en seis apartados.

El primero, Comunicaciones, con cuatro artículos. El primero, corresponde al Dr. César Gutiérrez, emblemático archivero del Perú, acerca de "Los documentos y el estudio de la Independencia del Perú". Le sigue el maestro de la historia de Arequipa Dr. Eusebio Quiroz Paz Soldán quien escribe "Perú, doscientos años libre e independiente" con una sabia conclusión: "¿Parta qué se fundó la República?", a los doscientos años respondemos con absoluta convicción: para que viviendo libres alcancemos la felicidad" p.23. Por su parte, el pastor de la arquidiócesis, Mons. Javier del Río, en su lúcido artículo "La oportunidad del Bicentenario" nos alienta a salir de la crisis pluridimensional del Perú del Bicentenario caminando juntos: "Elo camino es el diálogo a todo nivel, la integración esos amplios sectores de la población nacional que hasta ahora han sido marginados, el aprecio por la diversidad que complementa, la búsqueda conjunta del desarrollo humano integral de todos y cada uno de los peruanos"p.26. El cuarto "2021 en el Archivo Arzobispal" nos da cuenta del acucioso servicio como custodios del fondo documental, que a pesar de la pandemia, ha seguido atendiendo al público, ha continuado con la clasificación de "correspondencia" y "sin clasificar"·, la digitalización, la edición de la revista; se da cuenta de nuevos documentos manuscritos y libros recibidos en calidad de donación.

La segunda sección, "escritos de los prelados", se brinda el sermón Te De Deum de Mons. Mariano Holguín con motivo del 85 aniversario patrio en la catedral de Lima, (28 julio 1906), la carta pastoral del mismo Mons. Holguín con motivo de los 50 años de la proclamación de san José como patrono de la Iglesia Universal.

El tercer acápite, "estudios" ofrece cuatro trabajos, acerca de "Diezmeros, labradores y trajinantes. Las otras víctimas de la Independencia en Arequipa, 1818-1824" de Victor Condori, "El Patronato: La herencia colonial en las nuevas repúblicas hispanoamericanas en el S. XIX" de Carmen Villanueva y dos sesudos trabajos del mismo director de la revista "Un escritor recoleto en defensa de la fe y fomento de la piedad. Fray Elías del Carmen Passarell (1839-1921)" y "Templos de Arequipa, Paucarpata, 1800, 1817, 1826".

El cuarto, "instrumentos descriptivos" se presenta el "índice del legajo 85 del fondo de causas criminales de la Intendencia de Arequipa" (1784-1796)

El quinto y central se refiere a "documentos relacionados a la Independencia" con diez trabajos entre los que destaco la "sumaria información contra el presbítero Mariano José de Arce (1815"por Arlet Ocopa, "Documentos sobre las celebraciones del primer aniversario de la batalla de Ayacucho en Arequipa" de P. Peralta y L. Vilca, así como "Tomás Landa Vizcarra, prócer de la Independencia"

En la sexta "visitas/crónica" se da a conocer "visitas a la doctrina de Tisco" Walter Ramos y "Una deliciosa crónica de Chapi, 1884-1903" por Jaime Herrera.

Aumenta el atractivo de la revista las 11 ilustraciones del archivo arzobispal y del convento de La Recoleta, además de la portada dedicada a Monseñor Agustín Ugarte. Entre ellas, el singular retrato del genial P. Elías Passarell de 1921.

Da gusto ver cómo ni la pandemia ni tantos obstáculos ha impedido ver la luz esta magnífica revista que ¡laus Deo! ha llegado a su número 15. ¡Que siga y no se detenga por nada! Mil gracias.

 

EL PADRE PASSARELL, FRANCISCANO CATALÁN AREQUIPEÑO, SABIO Y SANTO

Agradezco al historiador amigo Álvaro Espinosa de la Borda por compartir el fruto de muchas horas de investigación, sobre todo en el archivo de La Recoleta de Arequipa, como adelanto de la voz en el "Diccionario de Historia cultural de la iglesia en América Latina" [1]

Passarell CALCINA, Elías del Carmen (Igualada [Barcelona]17-XII-1839-†Lima 11-VIII-1921) franciscano misionero, predicador, formador, guardián, y escritor.


Fueron sus padres Roque Passarell y Francisca Calcina, que le pusieron por nombre Juan Bautista. Su infancia la pasó en medio de los avatares de las guerras carlistas y la persecución religiosa de que fuera objeto la Iglesia en España por esos años. Después de sus estudios de primaria y secundaria, pasó al seminario de Vich. Viajó al Perú a fines de 1855, llegando los primeros días del siguiente, presentándose al convento de los Descalzos de Lima para ingresar en la orden, vistiendo el hábito franciscano en Ocopa, profesando allí los votos simples y solemnes hasta ser ordenado sacerdote en 1864. Recorrió los departamentos de Ayacucho, Huánuco y Lima. Producida la guerra entre España y el Perú, hubo de huir para evitar la orden de arresto y expulsión dada por el gobierno peruano. Luego, permaneció en los famosos claustros de Ocopa algunos años. En 1869 fue enviado a Arequipa, constituyéndose en uno de los fundadores del Colegio Apostólico de San Jenaro.

Llegó a ocupar la guardianía del Colegio hasta en tres oportunidades: 1872 a 1875, 1878 a 1881 y de 1888 a 1891. Participó en diferentes campañas de misiones populares a diversos lugares del obispado, como también a los de Puno y Cusco; participando en la erección de las hermandades de la Tercera Orden franciscana de Mollendo, Moquegua y Tacna. En el Colegio enseñó Latinidad y Literatura, Filosofía, Teología, Derecho, etc.

Prolífico escritor, la figura del padre Passarell domina la escena del convento recoleto en las últimas décadas del siglo XIX. Autor de más de un centenar de títulos, su obra es de variada temática. Así: Obras de Texto (para enseñanza escolar), Obras científicas o de educación, Obras predicables, Obras históricas, Obras poéticas o literarias y amenas, Obras de controversia, Triduos, novenas, meses a Cristo, María, Ángeles y Santos, Dirección espiritual, Obras de piedad y devoción, Obras ascéticas, místicas y ejercicios de piedad.

Sus numerosas obras nos impiden consignarlas en su totalidad, pero mencionaremos algunas: "Vida de la V.M. Sor Ana de los Ángeles Monteagudo" (Barcelona 1879), "Vida de Nuestro Señor Jesucristo..." (Arequipa 1880), "Nueva historia de la Filosofía" (Arequipa 1882), "Catecismo sobre el perfeccionamiento del hombre" (Arequipa 1882), "Las glorias del excelso patriarca San José" (París 1886), "Historia Eclesiástica..." (Lima 1886), "Filosofía de la Religión... " (Arequipa, 1888), "Máximas de San Francisco de Asís" (Barcelona 1888), "Devocionario Manual de la Tercera Orden..." (Lima 1889), "Biblioteca Manual de Predicadores" (Arequipa 1890-1891) 7 tomos, "El bienestar doméstico y social por medio de las Madres de familia" (Lima 1893), "Los Jesuitas ante la sociedad" (Lima 1894), "La Regeneración Peruana" (Arequipa 1895), "Las glorias de Arequipa" (Arequipa 1895), "Conveniencia de los Círculos Católicos de Obreros..." (Lima 1896), "Las maravillas del Carmelo" (Bilbao 1898), "Nuevos estudios sobre la educación de la mujer" (Einsiedeln 1899), "Soberanía del Romano Pontífice" (Arequipa 1901), "La caridad Cristiana y los peligros del siglo" (Arequipa 1902), "El racionalismo contemporáneo" (Arequipa, 1903).

En 1900 se incorporó a la Provincia de los Doce Apóstoles, dejando La Recoleta y pasando al convento de San Francisco también de Arequipa, donde permaneció algún tiempo, para trasladarse luego a Lima.

Fue designado Cronólogo, lector de Teología y Derecho, examinador de ordenandos, confesores y predicadores de la provincia. Continuó escribiendo, de esta época destaca "Compendio histórico de la Provincia de los Doce Apóstoles del Perú de la Orden de N. S. P. S. Francisco de Asís desde su fundación hasta nuestros días", al haber sido nombrado Cronólogo de la Provincia en 1903, obra que lo ocupó hasta 1909, escrita en diez cuadernos, todavía inédita. Además, está "Historia compendiada de las Tres Órdenes del gran Padre y Patriarca S. Francisco de Asís", publicada en Lima en 1918. Falleció en el convento de Jesús o San Francisco de Lima en 1921.

 

BIBLIOGRAFÍA Catálogo de las Obras y Opúsculos del M.R.P. Fr. Elías del Carmen Passarell. Imprenta La Providencia, Lima, 1906; A. Arce, Noticias biográficas de algunos misioneros del Perú. En: Efemérides de la Provincia Misionera de San Francisco Solano. Año XX, N°59, Lima, 1964; L. Arroyo, La Recoleta de Arequipa, Lima, 1951; J. Castro, R. P. Elías del C. Passarell. En: Revista Franciscana, Lima, 1921; A. Espinoza de la Borda, La Biblioteca del Convento de Recolección de San Jenaro de Arequipa: Fuente para el estudio de la historia local y nacional. En: Pueblos, provincias y regiones en la historia del Perú. Academia Nacional de Historia, Lima 2006; Manejando la pluma para mejor servir la causa de Dios: Escritores recoletos de Arequipa, Arequipa, 2008; J. Heras, Libro de incorporaciones del Colegio de Propaganda Fide de Ocopa (1752-1907), Lima, 1970; F. Richter Fernández Prada, Cronistas de la Provincia de los Doce Apóstoles de Lima. Historia Franciscana siglos XIX y XX. En: Revista Peruana de Historia Eclesiástica, N°8. Academia Peruana de Historia Eclesiástica, Cuzco, 2004; F. Saiz, Los Colegios Misioneros Apostólicos de Propaganda Fide del Perú y su transformación en provincias, Lima, 1998


[1] MÁS DATOS EN UN ARTÍCULO MÁS EXTENSO: "Un escritor recoleto en defensa de la fe y fomento de la piedad. Fray Elías del Carmen Passarell (1839-1921)" Revista del Archivo Arzobispal de Arequipa nº 15, 2021, 107-172.

Les comparto también mi nota: https://perucatolico.com/75-el-peru-independiente-segun-fray-elias-passarell-1839/

 

martes, 14 de junio de 2022

EL GRAN MENSAJE DE APARECIDA EN EL TRÍPTICO-RETABLO

Benedicto XVI ha dejado a los países de América Latina y el Caribe el regalo de su presencia, de su oración, de sus palabras vivificantes y valientes.  Junto a ello está el don de este tríptico que representa el "Cristo del envío".  El pueblo creyente lo irá recibiendo, no sólo como una ilustración de verdades.  Tal vez lo hará suyo y lo transformará, por la plegaria, en un icono de su devoción cálida y confiada, en una parábola pictórica en la cual se unen el Credo de la fe con la persona del Sucesor de Pedro.

La iglesia de Latinoamérica y del Caribe considera como hito inicial de su evangelización un icono: la figura mestiza de María de Guadalupe, representada en la tilma de San Juan Diego.  Ahora Benedicto XVI ha retomado esta tradición, y ha entregado a los Obispos participantes del Encuentro en Aparecida, un tríptico evangelizador y devocional.

En él se contienen la espiritualidad y el programa pastoral característicos que propone el lema de la V Conferencia: "Discípulos y misioneros de Jesucristo, para que nuestros pueblos en él tengan vida. "Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida" (Jn 14,6)".  El tríptico fluye de la tradición del arte cuzqueño.  Con este tríptico del Papa se encuentran simbólicamente en Aparecida, la cultura andina que comparten los países del océano Pacífico con el mundo lusohablante de las costas del Atlántico, al cual pertenece el santuario nacional mariano de Brasil

El programa iconográfico se despliega interiormente en ocho cuadros y en otras imágenes menores.

  1.El motivo central lo ocupa una representación de Cristo Resucitado, en la hora del envío misionero de los discípulos.  La radiante figura de Jesús preside la totalidad del tríptico con el halo de una serena victoriosidad.  En los rostros de los enviados se manifiesta la plural riqueza del pueblo de Dios.  Hay hombres y mujeres.  Algunos tienen tez blanca.  Otros rostros son de mulatos, de indígenas, o de mestizos.  Hacia el fondo se ve la escena del Calvario y dos ángeles. En la leyenda  se reproduce la autodefinición del Mesías, las palabras del envío discipular "vayan y hagan discípulos a todos los pueblos" (Mt 28, 19) y el solemne encargo de la Madre del Señor a su Iglesia.

 

 2. A la luz del milagro de Caná se señala catequéticamente el imperativo pastoral de movilizar el amor a maría de los fieles a una obediencia irrestricta al querer de Jesús "hagan lo que él les diga".  La figura de los esposos, destaca la grandeza del sacramento del matrimonio.  Las tinajas del vino expresan la alegría de los discípulos que, por la manifestación de gloria…. Creyeron en él".

3. Vocación de los primeros discípulos.  Pedro y Andrés, de Santiago y Juan son llamados.  Las palabras de elección de Jesús, tienen una réplica humilde de Pedro quien se siente del indigno para seguir la vocación de apóstol.  Desde ahora serán pescadores de hombres.  Los cuatro escogidos aceptan remar mar adentro y echar las redes sólo "en tu nombre".  El resultado es una abundancia milagrosa.  Han dejado todo.  Comienzan la senda del seguimiento discipular.

4.La multiplicación de los panes.  El verde de la hierba recuerda que ocurrió en primavera.  Cristo despliega el poder de su misericordia, haciendo abundante el escaso alimento inicial.  Pero no es él quien entrega el pan a la multitud –"denles ustedes de comer".  Los discípulos tienen el encargo de atender a los menesterosos.  Resuena aquí una urgencia impostergable.  Es el imperativo de la Iglesia Latinoamericana  y del Caribe de atender a los pobres y postergados, "sea en el socorro de sus necesidades más urgentes, como también en la defensa de sus derechos" (Homilía de los obispos 11-05).

5. Encuentro con los discípulos de Emaús.  Esta escena muestra como Jesús mismo entra en el dinamismo peregrinante de la Iglesia.  Durante el camino, él explica las Escrituras. En la mesa de Emaús, el Resucitado parte y comparte el pan.  Pictóricamente la atención se focaliza en la centralidad de la Palabra y la Eucaristía.  El texto de la leyenda registra la intensidad del encuentro del discípulo con su Maestro.  Es un ardor contemplativo que llevará a un nuevo trayecto misionero hacia Jerusalén

 

6. La venida del Espíritu Santo.  Es el nacimiento de la Iglesia.  Los apóstoles se congregan en torno a María Madre. Pedro tiene las llaves, como símbolo de su encargo específico en el Colegio Apostólico. "Todos quedaron llenos del Espíritu Santo".  Aparecen las mujeres, de las habla el libro de los Hechos.  Unidad en la comunión del Espíritu Santo.  Variedad de carismas.  Sólo por el vigor divino que el Paráclito les concede, podrán asumir la misión encomendada.

7. Los discípulos de Jesús evangelizan. Sucede ahora.  Los discípulos entran en la vida de "nuestros pueblos".  La evangelización ocurre en el diálogo cotidiano.  Los discípulos y misioneros del siglo XXI prolongan el amor y el compromiso de San Juan  Diego de Guadalupe, con la Biblia en la mano.  En su tilma va, impresa por el cielo, la imagen de la Virgen María, discípula perfecta y sabia educadora de los elegidos por Jesús para evangelizar

8. El Padre Eterno y el Espíritu Santo. Corona el tríptico una imagen del padre de Jesucristo.  Se le muestra unido al Espíritu al Señor Resucitado.  Con este remate, todo el tríptico logra un marcado carácter trinitario, tal como era usual en los retablos de la primera evangelización.  Se indica así cuál es la fuente y el destino de la historia humana.  Así el Dios Uno y Trino es propuesto como la suprema realidad de amor,  en la que se sostienen e inspiran todas las formas de comunión y solidaridad que brotan del evangelio

9. En las esquinas superiores de los paneles laterales abiertos, aparecen dos santos emblemáticos del primer siglo del cristianismo.  Uno es el gran misionero venido de España, Santo Toribio de Mogrovejo.  El Obispo místico realizó una gigantesca obra evangelizadora desde su sede limeña. La otra figura es Rosa de Lima.  Representa la recepción del Evangelio por parte de los criollos americanos.  Esta laica nacida en una familia de origen dominican,  llegó a una alta cumbre de intimidad esponsal con Cristo y de heroica caridad con los pobres

10. Cuando el tríptico está cerrado, aparece el escudo papal de Benedicto XVI, y se ve la dedicatoria de mano del Papa con la exhortación señera hacia el futuro: "Sean discípulos y misioneros de Jesucristo, para que vuestros pueblos tengan vida.  Aparecida, 13 de mayo de 2007".

El sello final es la Imagen de Nuestra Señora Aparecida.  En torno a ella se congrega un racimo abigarrado de diversos rostros del pueblo que ella protege y guía por estas latitudes.

 

http://www.portalmisionero.com/misioncontinental/triptico.htm

martes, 7 de junio de 2022

Un ratito con la Virgen María. P. Carlos Rosell, Lima 2022

P. Carlos Rosell Un ratito con la Virgen María (Paulinas, Lima, 2022, 217 pp) ISBN 978-9972-05-405-1

Llegó a mis manos como regalo personal del autor en la fiesta de María Auxiliadora. Ya bastaría para estar muy agradecido, por el gesto generoso, por la persona tan querida, por el tema tan entrañable.

En su presentación la hermana Simona, paulina, destacó que le había hecho reír. Nuevo valor en un tiempo tan tristón y propenso a las depresiones. Madre Carmen Toledano, agustina, nos aporta tantos valores que me recuerda lo que aquel padre de la Iglesia escribió de María: ""De María nunca se dirá bastante". ¡Cuántas lecciones y qué bien contadas para dejarnos las ganas de leerlo!  https://www.facebook.com/events/537164598119598

Claro que no se puede sintetizar mejor que como hace el propio autor en la presentación y forma parte de su estilo, especialmente en sus breves y sustanciosas homilías:

"Fiel al estilo de los anteriores libros, inicio siempre con una anécdota o historieta graciosa para luego entrar de la forma más sencilla posible a explicar una enseñanza sobre la Santísima Virgen María.

He tratado de abordar todo lo que un católico debe saber sobre la Madre del Señor. Por ello, se encontrarán con los cuatro dogmas marianos y otras verdades relacionadas a María; además, desarrollo títulos que le damos a la Virgen y virtudes que Ella nos enseña.

Mi intención es que este texto sea una ayuda para mejorar nuestra relación con la Madre de Dios, quien además, y esto no se nos debe olvidar nunca, también es nuestra Madre. Nuevamente hoy Jesús nos dice a cada uno de nosotros refiriéndose a María: «He ahí a tu Madre» (Jn 19,27)." (pp.4-5)

En un cómodo formato y atractiva presentación, las más de doscientas páginas se digieren con gusto a través de sus 31 capítulos, uno para cada día, ideal para saborearlos a lo largo de un mes.

Son ya 18 en Paulinas, todos auténticos "bestseller"  y el cuarto de tema mariano "María y el purgatorio", "María desatanudos", "Cada día en el corazón de María".

Sorprende que un libro en apariencia tan chiquito pueda ofrecernos tanto: Fuentes bíblicas, tratado teológico -cristocéntrico- "de barrio" como comentó el propio autor, fuerza pastoral con olor a oveja como fruto de su celo apostólico, ternura maternal, con citas de los Padres de la Iglesia y de los santos, con especial atención a San Agustín, mujeres santas con predilección por Santa Faustina -no en vano es el párroco del santuario del Señor de la Divina Misericordia, los papas -especialmente de san Juan Pablo II y Francisco.

Me ha sorprendido gratamente que dé espacio a los dogmas marianos, las verdades más importantes, sus virtudes, las formas de culto mariano esenciales como el rosario, las advocaciones marianas, todo ello empapado en una desbordante vida interior de comunión con María que sabe compartir con el lector a través de un lenguaje teológicamente preciso, palabras sencillas, simpáticas anécdotas, hondas vivencias.

Sin duda que su objetivo de mejorar en los fieles su relación con la Madre se cumple y con creces. Muchas gracias

90 AÑOS DE LAS O.M.P. EN EL PERÚ

90 AÑOS DE LAS O.M.P. EN EL PERÚ

Les comparto el sintético texto colgado en la web acerca de la historia de las OMP en el Perú en el 90 aniversario de su fundación, brindando nuestra oración y felicitación por tan significativo organismo en la persona de su director, P. Víctor Lívori :

https://omp-peru.org/2022/06/07/aniversario-de-las-obras-misionales-pontificias-omp-peru-7-de-junio/

El Perú lidera a los países de América Latina en recibir la primera de estas Obras – la Obra de la Infancia Misionera. Según los Annales que se encuentra en los archivos de la Santa Sede en Roma lo confirma este comentario en los Annales del 1850:" El arzobispo de Lima muestra un afecto por la Obra y le duele en enviar por lo pronto nada más que una ofrenda personal" (Annales vol. III, p. 77 e 301). Otro comentario del 1860 narra que; "en Lima los niños han hecho una colecta y la ponen a disipación" (Annales 1861 p.80) Las hermanas de los Sagrados Corazones y las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl han sido las primeras en promover la Santa Infancia. (Annales 1876, p. 138 Una linda anécdota narra una hermana de la Caridad cuando un niño nacido de padres protestantes que iba a su "nido" explicaba a su mamá cuando lavaba la ropa la catequesis recibida en la Infancia Misionera. Su mamá lo escuchaba pacientemente, pero la tocó tanto que ella con su esposo se convirtieron y se bautizaron en la iglesia católica.

Mientras se extendía en el Perú la Infancia Misionera en las últimas décadas del siglo diecinueve y los primeros del siglo veinte las obras se hacen pontificias en el 1922.

Así en el Perú las Obras Misionales Pontificias están presente desde el 1932 en que fue instalado el Consejo Nacional de la Obra Pontificia de la Propagación de la Fe. Según los archivos que se encuentran en la Santa Sede la Congregación para la Evangelización de los Pueblos nombró el 7 de Junio de 1932 al Padre Francisco Cheeseman, O.F.M. como el primer responsable de la Obra de la Propagación de la Fe en el Perú (en aquel tiempo se llamaba Presidente y no Director Nacional). En el 1937 se establecieron las Obras Misionales Pontificias de San Pedro Apóstol para el Clero Indígena y la de la Santa Infancia o Infancia Misionera. El Primer Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias fue nombrado en el 1940.

Fue Mons. Pablo Chávez Aguilar que estuvo como director hasta 1945. La primera oficina de la OMP fue en la Oficina de la Propagación de la fe en el Palacio Arzobispal, Calle Arzobispo 257, of. 9 Cercado. En esta época, exactamente el 25 de Noviembre del 1944 se efectuó la primera colecta pública en Lima, Callao y Balnearios con la colaboración de la Junta Auxiliar de Damas de la Propagación de la Fe y de los grupos de colectores organizados con elementos de las parroquias. Así fue el inicio de la Colecta Pública que hoy se llama colecta El 28 de Junio del 1945 fue nombrado director el P Manuel Noriega Sotomayor s.j. que dirigió esta institución hasta el 11 de mayo del 1952.

En su periodo se resalta la presencia de un taller apostólico de las misiones iniciado y dirigido por la Sra. Laura Correa Olavegoya que elaboraba a través de señoras y señoritas voluntarias ornamentos litúrgicas y los vendían entregando toda la ganancia a las misiones. Con el P Manuel Noriega s.j. se inició la época de crecimiento vertical de las Obras Misionales Pontificias debido a su extraordinario entusiasmo y dinamismo y total decisión a este fin.

Desde mayo 1952 hasta mayo de 1955 las Obras Misionales Pontificias tenían como director ejecutivo transitorio al P. Martin Urrutia Baraibar s.j.

La santa sede nombra el 21 de mayo del 1955 al P. Ricardo Durand Flores s.j. que cumplió un periodo bastante largo hasta el 31 de diciembre del 1973. El dio un realce al Gran día Universal de las Misiones (Domund). El 1 abril de 197 aparece el primer número de la revista "Esquila Misional", órgano de las Obras Misionales Pontificias. Después del fructífero período de animación misionera el P. Ricardo Duran s.j. fue nombrado obispo.

Lo mismo sucedió con el P Felipe Maria Zalba Elizalde O.P. que fue nombrado como director de las OMP el 1 de enero del 1974 hasta mayo del 1981 cuando fue consagrado obispo auxiliar de Arequipa y luego obispo prelado de Chuquibamba. Mons. Zalba inicia en el Perú el movimiento Jóvenes Sin Fronteras.

El siguiente director nacional fue también religioso de la congregación misionera comboniana. El P. Mario Mazzoni Guzmeroli mccj también tuvo un periodo bastante largo al frente de las OMP desde junio del 1981 hasta diciembre del 2000. Cabe mencionar que en este periodo en el año 1991 se celebró en Lima Perú el gran Congreso Misionero Latinoamericano COMLA IV del 2 al 5 de febrero.

La Santa Sede nombra desde el 26 de febrero 2001 al P. Gianfranco Iacopi Ghirlardi que estuvo de director nacional de las OMP hasta enero del 2011.

El 26 de febrero del 2011 la Santa Sede nombró al P. Víctor Livori mssp como nuevo Director que realizó la búsqueda en los archivos de la misma sede para descubrir el inicio de las Obras Misionales Pontificias como institución en el Perú y desde luego se celebra el 7 de junio como fecha central de la fundación institucional.